Hola
de nuevo en un fin de semana de fiestas y con buenas temperaturas todavía.
Reflexionaba sobre el libro que hoy os propondría y me he decidido por uno que
me ha llevado a muchos lugares de mi juventud a partir de pequeños datos, es
curioso como compartimos recuerdos con personas totalmente ajenas a nosotros,
al menos esto me ha pasado leyendo el libro que hoy os traigo y que comienza así:
Prólogo
“Fue el primer día de mi humillación.
Me metieron en un vuelo de vuelta a casa, a Inglaterra, y me instalaron
temporalmente en un piso de alquiler en St. John’s Wood. Era un octavo, las
ventanas daban al estadio de críquet. Lo habían elegido, creo, por el conserje,
que ahuyentaba a los curiosos. No salí para nada. El teléfono de la pared de la
cocina sonaba una y otra vez, pero me advirtieron que no contestara y que
dejara el móvil apagado. Miraba los partidos de críquet, un juego que no
entiendo, que no llegaba a distraerme de verdad, pero aún así era mejor que
contemplar el interior de aquel apartamento de lujo en el que todo estaba
diseñado para resultar perfectamente neutro, con los cantos redondeados, como
un iPhone.” […]
Habéis
leído bien, el libro que os propongo comienza su historia desde el mismo
prólogo donde se crean suficientes dudas para seguir leyendo…os suena?, lo
habéis leído? Pues ya sabéis en unos días os digo el título y os cuento algo
más.
Hasta
luego, Vela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario